El relleno de pómulos con ácido hialurónico ofrece resultados muy naturales, además de ser una excelente alternativa para recuperar la firmeza de la piel y lograr un aspecto mucho más joven. Te contamos todo lo que debes saber sobre esta técnica facial a continuación.

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¿Qué es el relleno de pómulos?

Los pómulos son los responsables de sostener el tercio superior de la cara, y una parte fundamental del rostro para lograr armonía y proporción.

Con el tiempo, disminuye la turgencia y elasticidad de la piel, produciendo la pérdida de volumen en los pómulos. Como consecuencia las mejillas se ven caídas y sin volumen, contribuyendo a un rostro más envejecido y decaído.

El relleno de pómulos con ácido hialurónico permite remodelar las facciones del rostro y combatir la flacidez facial, mejorando el aspecto de las mejillas de los pacientes, y aportando juventud a la cara.

¿En qué consiste el relleno de pómulos?

El relleno de pómulos consiste en inyectar ácido hialurónico en las mejillas para mejorar su apariencia o crear una forma facial más deseada. La inyección se realiza mediante una aguja fina o una cánula.

El ácido hialurónico es un material de relleno comúnmente utilizado en los tratamientos faciales, debido a que es biocompatible (se encuentra de forma natural en el cuerpo) y se reabsorbe gradualmente. Ayuda a hidratar y dar volumen a la piel.

El procedimiento suele ser rápido y se realiza en la consulta con anestesia local, en una sola sesión. El paciente podrá regresar a sus actividades normales inmediatamente después.

Los resultados son generalmente visibles inmediatamente y pueden durar de 6 a 12 meses, dependiendo del producto utilizado. Para mantener el efecto deseado pueden ser necesarios los retoques de manera periódica (de forma anual o cuando se requiera) .

Es importante tener en cuenta que este procedimiento debe ser realizado por un profesional cualificado en medicina estética facial para minimizar los riesgos y obtener los mejores resultados.

¿Tiene efectos secundarios?

El relleno de pómulos es un procedimiento médico que, como cualquier otro, tiene algunos posibles efectos secundarios. Los efectos secundarios más comunes son:

  • Dolor o sensación de pinchazos en el lugar de la inyección.
  • Hinchazón o enrojecimiento temporal en la zona tratada.
  • Pequeños moratones o hematomas.

Sin embargo, estos efectos secundarios son temporales y suelen desaparecer en unos pocos días.

En raras ocasiones, pueden aparecer efectos secundarios más graves, como infecciones, reacciones alérgicas o desplazamiento de los implantes. Por esta razón, es importante que el procedimiento sea realizado por un profesional cualificado y que se sigan las instrucciones de cuidado después del tratamiento.

Recomendaciones postratamiento

Después de un tratamiento de relleno de pómulos con ácido hialurónico, es importante seguir algunas recomendaciones para minimizar los riesgos y asegurar los mejores resultados. Algunas recomendaciones son:

  • Evitar la exposición al sol y al calor intenso durante las primeras 24 – 72 horas después del tratamiento.
  • Evitar realizar ejercicio físico intenso o actividades que puedan aumentar la presión en la zona tratada durante las primeras 24 horas.
  • Evitar tomar aspirinas o algunos antiinflamatorios, durante las primeras 24 horas, por aumento del riesgo de hematomas.
  • Evitar tocar o masajear la zona tratada durante las primeras 24 horas.
  • Aplicar frío de forma moderada en la zona tratada durante los primeros días después del tratamiento para reducir la inflamación.

Beneficios del relleno de pómulos con ácido hialurónico

Te resumimos los beneficios del relleno de pómulos con ácido hialurónico son:

  • Mejora la apariencia de las mejillas caídas: El ácido hialurónico ayuda a dar volumen a las mejillas, lo que las hace lucir más jóvenes y definidas.
  • Mejora la simetría facial: El relleno de pómulos puede ayudar a crear una forma facial más simétrica, lo que mejora la apariencia general.
  • Efecto inmediato: El efecto del relleno de pómulos con ácido hialurónico es inmediato, lo que permite ver los resultados después del procedimiento.
  • Seguro y no invasivo: El relleno de pómulos con ácido hialurónico es un procedimiento no invasivo y seguro.
  • Duración temporal: El ácido hialurónico es un relleno temporal, lo que permite una mayor flexibilidad y menos compromiso a largo plazo.
  • Puede combinarse con otros tratamientos. El relleno de pómulos con ácido hialurónico puede combinarse con otros procedimientos estéticos, como productos de uso médico con efecto lifting, inductores de colágeno, o el relleno labios, para obtener un resultado más completo.

 

 

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